martes, 24 de agosto de 2010

El verano del pepino

Una muy buena amiga comenta de vez en cuando que tuvo un profesor que aseguraba que algunas series de televisión se programan para crear vocaciones. Así pues, cuando la sociedad necesita médicos surgen “A cor obert”, “Hospital Central” y “Urgencias”, y cuando se requieren policías “El Comisario”, “CSI” o “Cops”.

He pensado que posiblemente, este complot que manipula las mentes de los televidentes sea extrapolable a otros ámbitos. Este verano, por ejemplo, debe haber excedente de pepinos y el sector de la publicidad ha decidido echar una mano al de la agricultura, y de manera subliminal incentivar el consumo de esta hortaliza.

Todo empezó con un anuncio de tónica que protagoniza el actor Hugh Laurie. Aunque a todos nos sorprendió, este señor proponía cambiar la clásica rodaja de limón que suele añadirse a los vasos de refresco por una rodaja de pepino. Atención al hecho de que no nos lo proponga cualquier persona, si no el mismísimo Dr. House!

Posteriormente, sin proponérmelo, pero ya con el subconsciente predispuesto, empecé a darme cuenta que en diversos anuncios de queso para ensalada, atún u otros condimentos, éstos aparecían siempre acompañados por un poco de pepino.

Pensé que todo eran imaginaciones mías, pero finalmente, llegó la confirmación definitiva: el desodorante de pepino. Suena extraño, pero es tal cual lo cuento. Tampoco sorprende si lo pensamos detenidamente. Hay desodorantes con aroma a África, a Nautilus, a Verde Bosque, Polo Norte, seda y hasta algodón. Ahora, en los tiempos de la gran promoción del pepino, el frescor de esta hortaliza llega a nuestras axilas.

Estoy expectante ante el próximo anuncio de Durex-Play-O...

4 comentarios:

  1. Me admiran tus suspicaces dotes de observación, Mirinda.
    Yo, en cambio, acepto sin asomo de sentido crítico muchas de las imposiciones que me ofrece la televisión y, con toda probabilidad, caigo en las garras del monstruo.

    Esta vez has rizado el rizo y he confirmado tu perspicacia en mi propia cocina: por primera vez en muchos años los pepinos no han ido mermando en el verdulero de la nevera, encogiéndose hasta casi desaparecer a causa de mi despiadado olvido.

    No están ahí y los había comprado, así que la publicidad me ha colado un gol. Espero, al menos, que saludable.

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  2. Hay que hacer una reflexión... y después de hacerla, darte las gracias por ser tan observador. La crisis del pepino ha llegado. Increible pero cierto. Y pensar, que todavía falta algo por llegar en todo esto a 2 años vista. Si continuan estas estrategias tan estudiadas no quedará otra que el cierre de fronteras.

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  3. Problema - Solucion. Lo peor es no hacer nada. Por mucho esfuerzo que nos cueste a corto plazo. Aumentar exportaciones a Asia, Africa y Sud America. YA. Y sin ocultar la misma.

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  4. Con la crisis del pepino de mayo de 2011 me ha venido a la mente esta antigua entrada de mi blog. Ayer vi como miles de pepinos se destinaban a fabricar piensos y abonos, y sin embargo ya desde el año pasado existen múltiples nuevas utilidades... intento establecer algún tipo de relación entre estos nuevos usos y la situación actual, pero al final solo llego a una conclusión: es simplemente casualidad, no existe causalidad.

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